Hola,
El año 2021 está empezando a despedirse, sus últimos días se van desgranando y dejando a cada uno su propio néctar.
Algunos lo habrán vivido con inquietud, miedo o desolación y otros en cambio lo han podido vivir como una oportunidad y tal vez consiguiendo grandes retos.
¿Qué hace que sea diferente entre los unos y los otros?
Tal vez la actitud… ver o no ver televisión o por lo menos noticias de las que incitan al miedo y al mal llamado “yo te protejo”.
Tal vez su proceso de introspección y crecimiento interior. Cada uno siguiendo lo que dentro grita para ser visto y puesto en orden.
Hace unos días alguien me dijo “ya vendrán tiempos mejores” esta frase me chirrió por dentro y me puse a reflexionar y algo dentro de mí gritó “No, no hay ningún tiempo mejor que el que estoy viviendo ahora”.
No podemos postergar, hasta que sea el mejor momento, yo soy el protagonista de mi vida y el responsable de hacer de este momento “el mejor”.
Si tengo dificultades y no puedo salir de ellas por mis propios medios “busco ayuda” con el convencimiento que “si quiero puedo”, por ello, si quiero encontrar ayuda de verdad, todo se va a dar para que así sea.
Es momento de confiar en la capacidad cocreadora que tengo como ser humano, es momento de entender que la materia es el resultado de la energía/información y ésta se crea a través de nuestros pensamientos y creencias.
Si quieres que algo cambie, empieza por crear dentro de tí la posibilidad.
Te propongo un ejercicio que habitualmente practico con mis clientes.
“La pregunta milagro” encuentra dentro de tí el peor escenario, lo que te preocupa y que tal vez no te deja dormir.
Cuando lo tengas, cierra tus ojos e imagina que te vas a dormir y que sueñas que eso, de forma milagrosa, ya se ha resuelto y cuando te despiertas, imagina que sería diferente si eso estuviera en orden y dejara de interferir en tu vida.
Imagina con todo lujo de detalles lo que es diferente; visualiza los colores que aparecen en tu imagen de solución, si en lo que imaginas puedes incluir olor, sonido, sabor y tal vez, puedes acompañar tu visualización poniendo tu mano derecha sobre tu hombro izquierdo y decirte a tí mismo/a estoy aquí para tí, durante largo tiempo no te he tenido en cuenta pero ahora estoy aquí y puedes contar conmigo, te acompaño en esto y caminamos de la mano ahora, confía plenamente.
Después de tantos años acompañando a las personas en su camino de vida, me doy cuenta que cuando tienen un problema, sólo alimentan al problema y así solo lo hacen grande.
¿Te imaginas por un momento solo poner atención al pensamiento “mágico” de soluciones posibles y ponerte en la piel del que es capaz de resolver?
Te invito a que este nuevo año que está a punto de nacer, venga repleto de “milagros” y que tú los hagas posible, todos los días.
El Equipo que algún día soñamos con la posibilidad de hacer lo que hacemos y sentirnos felices por ello, te deseamos Felices Fiestas y todo lo mejor para tu nuevo año.